La resolución de conflictos en materia de nombres de dominio

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La resolución de conflictos en materia de nombres de dominio

Alejandra Valdez Espaillat;

Abogada de la firma Valdez Albizu

Es una realidad palpable que la red se ha convertido en uno de los más importantes modos de comercio, comunicación y educación, lo que aumenta cada día más la importancia y valor comercial de un nombre de dominio.

Un nombre de dominio se define como un “sustituto nemotécnico de una dirección IP, código numérico que permite la identificación de un ordenador en la red”1. En otras palabras, es la dirección de un sitio web fácil de identificar y recordar, v.g. amazon.com.

Los nombres de dominio se dividen en dos categorías: los de nivel superior (top level domain names) y los de nivel secundario (second level domain names).

Existen dos tipos de nombres de dominio de nivel superior. En primer lugar tenemos los genéricos (v.g.: .com, .net, .org, .mil, .int, .edu, .gob, .biz, .info, .name, .coop, .museum, .aero y .pro); y en segundo lugar los de códigos de países (v.g.: .do, .es, .mx, .ar., .uk, et al)2.Como ejemplo de nombres de dominio de nivel secundario podemos citar “.gov.do”, “.edu.es”, entre otros.

De otra parte, una marca se define como “todo signo susceptible de representación gráfica que sirva para distinguir en el mercado los productos o servicios de una empresa de los de otra”3. Aunque el nombre de dominio posee, al igual que las marcas, la capacidad de distinguir el origen de sus productos y servicios de los de un competidor, se diferencian en que, contrario a las marcas, son unívocos y universales con independencia del territorio y del uso que se haga de los mismos. Debido a su facilidad de retención, cada vez más se utilizan como identificadores comerciales y sustituyen muchas veces las propias marcas. Cabe destacar que “aunque no todo dominio trae causa de una marca, ni forzosamente sea usado como tal, lo cierto es que el nombre de dominio es el uso por excelencia de una marca en la red.”4

Mientras las marcas en la mayoría de los países se sujetan a un examen previo por parte del organismo encargado de su emisión, así como de un plazo concedido para que cualquier tercero que se sienta afectado por su eventual registro se pueda oponer argumentando los motivos por los cuales la misma sería violatoria de sus derechos adquiridos, el caso de los nombres de dominio es completamente distinto. La adquisición de un nombre de dominio es muy fácil y expedita, siendo éstos concedidos sin ningún tipo de examen ni publicación previa. Como resultado de la ausencia total...