Un ejemplo se fue

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"Un ejemplo se fue"

Juan F. de la Rosa

Descendió a la tumba el ilustre ciudadano don Manuel Wenceslao Medrano Vásquez; en el varias manifestaciones positivas hicieron presencia para disfrute de la sociedad que le toco vivir, ya que desde muy temprano se conectó con los reclamos justos y las voces que buscaban espacio después del ajusticiamiento de Rafael Leónidas Trujillo Molina.

Su generosidad y comprensión le permitieron crecer sin límite en el corazón de la gente buena, noble y sin malicia. La oficina que encabezo estuvo abierta para aquel interesado en buscar orientación judicial, en ocasiones instruyendo jóvenes noveles en el ejercicio del derecho.

Contribuyo de manera significativa para lograr el espacio que tiene hoy el pueblo dominicano, donde cada cual puede expresarse libremente a través del medio que considere Mil, sin que ello resulte perjudicial a quien sustente el criterio dictado por su conciencia.

Junto a un grupo de valiosos profesionales trabajo Don Medrano Vásquez, cuando en el periodo de los "doce años" las cárceles del país estaban abarrotadas por hombres y mujeres desafectos al régimen de esa época triste de nuestra historia reciente. Con la toga al hombro y el birrete en un bolsillo salió a las calles corriendo sin detenerse por la represión impuesta dirigida por los remanentes de la "era", hasta llegar a los estrados para asumir la defensa de Plinio Matos Moquete, Jorge Puello Soriano (El Men), Rafael Taveras (Fafa), Ingeniero Báez Pérez, Roberto Santana, etc. Esa honrosa tarea la cumplió Don Manolo, como les decían sus amigos y familiares, con su inseparable amigo Ramón Urbáez Brazoban, y los doctores Leonor Sanchez Baret, Dagoberto Vargas Alonso (fallecido), Mario García Alvarado (fallecido), Abrahán Bautista Alcántara, Héctor Cabral Ortega, Ramón Antonio Veras y Abel Rodríguez del Orbe, etc.

Figuro en primera línea representando a doña Adriana y familia cuando ocurrió el bochornoso asesinato del periodista Orlando Martínez; la temeridad y tremendismo orquestado el primero de julio de 1966, fue combatido de manera responsable y con una extraordinaria vocación solidaria por don Medrano Vásquez.

El sacrificio asumido por este luchador incansable nos dice cuanto impactaba el abuso en su fuero interno, si observamos que él no era un abogado dedicado a la materia criminal; su especialidad estuvo orientada hacia la legislación de tierras, donde ha dejado un gran legado en el orden doctrinal y jurisprudencial: ahí están...