Justicia: transformación y confianza

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GACETA JUDICIAL |3

AÑO 25, NÚM. 413, ENERO 2023

JUSTICIA: TRANSFORMACIÓN

Y CONFIANZA

No hace falta ser un visionario para vaticinar que, a medida

que nos adentramos en el siglo XXI, la sociedad nos exigi-

rá cada vez más y se exigirá más a sí misma. Se trata de una

evolución positiva: una exigencia que dignifica. Cada vez somos

más los que pensamos así.

Por eso estamos transformando el sistema de justicia. Para

poner la institución al día. Para prepararla y adelantarnos a los

cambios sociales que vendrán en los próximos años.

Toda institución debe poner por delante a las personas. Es un

elemento fundamental. Para el Poder Judicial esto se traduce en

pasar de atender expedientes a atender personas. Esa es la gran

transformación cultural del sistema de justicia que hemos empren-

dido.

Ese es el objetivo real de los tres pilares de nuestro Plan Estraté-

gico Institucional: 0 % mora, 100 % acceso y 100 % transparencia.

Transformaciones como las audiencias virtuales ya estaban en

nuestro horizonte en 2019, pero la pandemia de COVID-19 nos

hizo reaccionar y nos obligó a ponerlas en marcha. Fue así como

lo que era un plan para cinco años tuvo que aplicarse a toda pri-

sa por la emergencia. Y fueron los jueces, las juezas y demás per-

sonal quienes llevaron adelante este proceso de integración de las

tecnologías.

Poco tiempo después, junto con la Ley de Uso de Medios Digi-

tales que impulsamos desde el Poder Judicial, con el apoyo de los

demás poderes estatales, así como también la Ley de Casación, con-

solidamos una ambiciosa agenda de programas y acciones. Una

agenda que presentamos el pasado 10 de febrero de 2023 en un

acto público con participación de jueces, trabajadores de la justicia

y miembros de la sociedad civil.

Nos movemos de una cultura de papel a una cultura digital, lo

que permite que los procesos puedan ser visualizados en toda su

extensión, desde que entra una solicitud hasta que se emite una

decisión.

La simplificación de las tecnologías mejora la administración

del sistema. Pero también supone un aumento significativo de los

niveles de transparencia y las posibilidades de servicio.

La mora continuará reduciéndose sustancialmente en todos

los departamentos judiciales. Con la aprobación de la ley de regio-

nes, comenzaremos a abordar las necesidades del sistema desde la

demanda real sobre el terreno, acercando los servicios a las per-

sonas.

Instalaremos un modelo de infraestructura segura, ecológica

y totalmente accesible, hasta la automatización de procesos y el

modelo de servicio que se brindará allí estará centrado en las per-

sonas. Ese es el espíritu de las ciudades judiciales, que un día exten-

deremos a todo el país.

También darán sus frutos los avances en materia de resolu-

ción de conflictos por vías alternas y la optimización del proce-

so penal para optimizar la calidad y eficiencia del sistema. Vere-

mos una descongestión notable de nuestros servicios, de forma

que podamos poner realmente atención prioritaria a los casos

que la requieren.

En la República Dominicana tenemos un inmenso potencial

para avanzar hacia grandes transformaciones.

Tenemos la misión de abrir la Justicia para fortalecerla. Por-

que esa es la única manera en que será posible mantener algo

mucho más importante: la confianza de los ciudadanos en las ins-

tituciones.